Refuerzos Pumas

Se dice que Jaime Lozano y el Tito Villa podrían ser dos de los refuerzos de los Pumas para la próxima temporada. Nada mal. Lozano es, como todos sabemos, "hecho en C.U." y a Villa le urge salir del Cruz Azul. Creo que ambos aportarían mucho. Se me ocurre que esto se podría complementar con alguien de experiencia y corazón universitario como Braulio Luna (para que cumpla un poco las funciones que tenía Palencia hasta el año pasado) y quizás repatriar a Efraín Juárez, quien ya se vio que en Europa no da el ancho pero es un buen elemento a nivel futbol mexicano. Eso, más los regresos a las canchas de Darío Verón y David Cabrera podrían redondear una buena plantilla para el Universidad. Ojalá.

Razones básicas de una derrota

No hay excusas: me duele decirlo pero Real Madrid planteó muy bien el partido. No entendí el once inicial del Barcelona, tampoco por qué dejó Guardiola en la banca a Alexis y Fábregas y por qué sacó a Xavi. Los cambios se dieron demasiado tarde. Tello es un gran prospecto, pero lo mandaron al matadero en un juego crucial... y Messi... Bueno, Messi fue desaparecido por el bloque compactísimo que inventó Mourinho. En fin, se perdió en lo táctico y con ello prácticamente se perdió la Liga. Queda la Champions, ojalá.

El futbol mexicano también tiene su chiste

Para continuar de algún modo con lo que escribí en mi anterior post, el hecho de que, desde hace algún tiempo, en México podamos ver el futbol de diversas partes del mundo parecería ser contraproducente para el balompié nacional. Al menos en primera instancia, resulta casi imposible refutar esto. Uno ve los partidos de ligas como la inglesa, la española, la italiana, la alemana, la francesa, la argentina, la holandesa, la brasileña, la portuguesa y hasta la uruguaya y con la mayor parte de ellas no hay punto de comparación, en especial con las cuatro primeras. El ritmo vertiginoso con que se juegan la Premier League o la Bundesliga o el arte que podemos ver en los torneos de España o Italia hacen que nuestro futbolito se vea de pronto tan lento y aburrido que recuerde aquella escena de Los Simpson en la que Homero contempla hastiado en la televisión un soporífero partido de soccer.
  Sin embargo, las cosas no son así de trágicas. Cierto que nuestro fut no posee la riqueza técnica, atlética y monetaria de algunas ligas europeas, pero tiene algunas características propias que lo hacen interesante y disfrutable. Hay una especie de folclor implícito que nos hace mirar con gusto hasta un partido entre Pachuca y Querétaro. Es un futbol tercermundista, sí, pero con una larga tradición y hecho exactamente con nuestra idiosincracia (no podría ser de otra manera). Claro que está lleno de defectos organizativos y que el manejo de la Federación Mexicana es terrible. Cierto que la injerencia de las grandes televisoras le resta competitividad en aras de mantener el negocio que representan los patrocinios. Es un balompié lleno de contradicciones, problemas y limitantes, pero tiene su lado colorido y divertido.
  Por supuesto que difícilmente veremos aquí un partido como el reciente Barcelona-Real Madrid o incluso el Arsenal-Aston Villa del domingo pasado. Pero siempre nos mantendrá entretenidos, precisamente por sus detalles a veces chuscos (como el gol con la mano de Emanuel Villa, el reciente sábado, con el que Cruz Azul le empató al Atlante en Cancún).
 No hay cómo aspirar siquiera a llegar a un nivel de calidad como el que se tiene en otros países, pero tampoco tenemos el peor futbol del planeta. Nuestra liga podría mejorar mucho, eso sí, pero el hecho es que cada fin de semana nos sigue llamando a verla y comentarla. ¿Qué le vamos a hacer? Como diría Cristina Pacheco: aquí nos tocó vivir.

¿Las mejores ligas?

La Federación Internacional de Historia y Estadística del Futbol (IFHHS) acaba de sacar la lista de las mejores ligas del mundo y, a decir verdad, sus conclusiones resultan muy discutibles. ¿La liga portuguesa y la liga francesa en cuarto y quinto lugares, por encima de la Bundesliga alemana y la Eredivisie holandesa? ¿La liga brasileña en tercer sitio? ¿La liga española en primero, por encima de la Premier League inglesa? Es más: ¿la liga mexicana en el lugar número quince, por debajo de campeonatos como los de Chile y Paraguay? Francamente...
  Cuando uno mira por la televisión mexicana el desarrollo de la mayor parte de las ligas más importantes del planeta, la idea es muy otra. Según mi muy particular punto de vista, el orden debería ser el siguiente, por países: 1. Inglaterra, 2. España, 3. Alemania, 4. Italia, 5. Brasil, 6. Holanda, 7. Argentina, 8. Portugal, 9. Francia, 10. Rusia o México.

1962-2012: medio siglo de Pumas en primera

Se dice fácil, pero hoy se cumplen cincuenta años de la llegada de los Pumas del Universidad a la primera división del futbol mexicano y puedo decir, con orgullo, que en ese entonces yo ya era seguidor del equipo auriazul.
  En 1962, yo tenía siete años de edad, cursaba el segundo año de primaria y en mi más antigua memoria tengo presente un partido nocturno en el Estadio de Ciudad Universitaria, Universidad contra Poza Rica, cuando los Pumas aún estaban en segunda. Eso debe haber sido meses antes del ascenso y recuerdo que quien me llevó fue mi hermano Sergio, entonces de diecisiete años. Así pues, yo también cumplo medio siglo como aficionado al cuadro de la Universidad Nacional Autónoma de México.
  De los jugadores de aquella época, me acuerdo del portero Alejandro Mollinedo, de Carlos Calderón de la Barca, de José Antonio "El Espátula" Rodríguez, de Raúl Chanes, de Alfredo Echávarri, de Genaro Tedesco, de Elías Muñoz, de Alberto Etcheverry. Luego vendrían "Rulo" y "Memo" Vázquez, José Luis "Calaca" González, Víctor Pérez, Carlito Peters, Luis Regueiro, Aarón Padilla y el único ídolo que he tenido en mi vida: Enrique Borja.

  Jugadores de leyenda de la escuadra universitaria hay muchos más. Nombraré sólo a algunos: Miguel Mejía Barón, Héctor Sanabria, Francisco Castrejón, Genaro Bermúdez, Mario Velarde, Arturo Vázquez Ayala, Bora Milutinovic, Evanivaldo Castro "Cabinho", Spencer Coehlo, Juan José Muñante, Carlos "Sobuca" García, José Luis "Pareja" López, Enrique López Zarza, Antonio de la Torre, Leonardo Cuellar, Hernán Cabalceta, Olaf Heredia, Ricardo Ferretti, Juan Carlos Vera, David Patiño, Luis Flores, Manuel Negrete, Manuel Manzo, Miguel España, Alberto García Aspe, Luis García, Jorge Campos, Claudio Suárez, Jesús Olalde, y, claro, Hugo Sánchez.
  Ya más recientes, destaco a Sergio Bernal, Bruno Marioni, Braulio Luna, Gerardo Torrado, Israel López, Rafael "Chiquis" García, Joaquín Beltrán, Leandro Augusto, Francisco "Kikín" Fonseca, Israel Castro, Darío Verón, Efraín "Chispa" Velarde, Pablo Barrera, Héctor Moreno, Efraín Juárez y Francisco Palencia, De hoy, a los "Pikolines" Alejandro y Marco Antonio Palacios, Javier Cortés, David Cabrera y Carlos Orrantia. Entre 1962 y 2012, a todos he podido verlos jugar (nos han dado siete títulos y grandes emociones que incluyen las lágrimas) y eso es algo que me resulta sencillamente maravilloso.

 

  Hoy se cumplen, pues, cinco décadas del ascenso puma a la primera (golearon 5 a 1 al Cataluña de Torreón, el 9 de enero de 1962) y yo no puedo menos que sentirme feliz y orgulloso. Por mis venas corre sangre azul y oro, de eso no tengo duda.

El Barça sin Guardiola

No sé si se trata de una broma, de un rumor, de algo posible o de una mera forma de llamar la atención por parte del medio que originó la nota (ignoró cuál fue). El caso es que se dice que el presidente del club Barcelona, Sandro Rosell, comentó que el sustituto natural de Josep Guardiola, cuando éste deje al equipo, sería el argentino Marcelo Bielsa, actual director técnico del Atlético de Bilbao.
  Independientemente de si eso es o no verdadero, la supuesta declaraciónn me llevó a pensar en algo que tarde o temprano será inevitable, ya sea por los cambios que suelen darse en los equipos o por el inexorable paso del tiempo: la desaparición del actual y maravilloso Barça, una escuadra de época.
  Aun en el caso de que Guardiola pueda alcanzar la trayectoria de Alex Ferguson con el Manchester United y permanecer con los blaugranas durante varias décadas, tendrá que llegar el día en que Xavi Hernández, Andrés Iniesta, Carles Puyol, Cesc Fabregas y hasta Lionel Messi deban retirarse o cambiar de equipo. Entonces sólo quedarán en el recuerdo y en la memoria visual la calidad, la categoría, la finura, la precisión, la clase, el arte con el cuál hoy juega el Barcelona. Sin duda llegarán otros jugadores que hoy están en las fuerzas básicas, pero la leyenda de esos locos bajitos quedará grabada para siempre y pasará a formar parte del mito.
  Sé que es un lugar común decir que somos unos privilegiados al poder ver, justo en su mejor momento, a este esplendoroso conjunto, pero es la verdad. Estos años recientes, primero con la era de Frank Rijkaard (sobre todo cuando Rafa Márquez estaba en plenitud y tenía como compañero a Ronaldinho) y luego con la de Josep Guardiola, han sido impagables. Por eso no me hago a la idea de que algún día todo terminará y pasará a formar parte de la historia, una historia brillante y exultante, una de las mejores cosas que pueden existir a estas alturas del todavía joven siglo.

El futbol en 2012

Inicia un nuevo año que en el universo futbolístico en realidad es apenas la mitad del mismo, ya que todos los torneos importantes van apenas a la mitad de camino. Esto significa que la primera mitad del año será la que definirá a todos los campeones, en especial a los de Europa (incluido el campeón de la Champions League).
  Pocas cosas hay definidas en competencias como la española, la inglesa, la italiana o la alemana, pero en lo personal me gustaría que ganaran Barcelona, Manchester United (o Arsenal), Juventus y Borussia Dortmund. En la Champions, por supuesto, el Barça.
  En cuanto a México, con eso de los torneos cortos, está a punto de comenzar el Clausura 2012 y las cosas no pintan como para algo muy espectacular que digamos. Sin embargo, es nuestro futbol y como sea lo disfrutamos. Creo que Tigres podría repetir, si mantiene ritmo y estructura, aun cuando su participación en la Libertadores (si logra pasar los juegos contra un equipo chileno aún sin definir) podría cansarlo y restarle fuerzas. Al resto de los equipos los veo con las mismas posibilidades. Tal vez como favoritos pondría a Morelia, Santos y Monterrey, si Vucetich logra poner orden en el vestidor. Guadalajara y Cruz Azul podrían caber en la lista, pero estarán también en la Libertadores y eso como sea desgasta a los equipos.
  Mis Pumas se ven frágiles, sobre todo sin Francisco Palencia, pero con ellos todo puede suceder... y en cuanto al América... La llegada de Miguel Herrera que en un principio parecía atinada, ahora no me convence del todo. Sus cuatro refuerzos son buenos, pero mantener a los jugadores del campeonato anterior realmente no creo que sea lo más atinado. Ya se verá.
  Luego de este ayuno de dos semanas (salvo la liga Premier que afortunadamente no se vio interrumpida), nos disponemos a disfrutar de la mejor parte del fut mundial, la del primer semestre del año. Creo que nos esperan muchísimas emociones.

Esos locos bajitos

"Hay muchas maneras de ganar, pero la de este Barcelona es fascinante".

José Sámano

Debo confesar que por primera vez desde que le voy al Barcelona (hace muchos años ya), esta vez no me habría importado tanto que hubiese perdido. Sí, me salió lo nacionalista y como muchos mexicanos también quería que el Chicharito Hernández y su Manchester United ganaran la Copa de Campeones de Europa. Pero fue otro Hernández, de nombre idéntico aunque la primera grafía sea una X y no una J, quien se llevó la famosa orejona al lado de su corte de bajitos, complementada por Messi e Iniesta. Al final me dio mucho gusto. Ni siquiera sentí pena por el equipo inglés, pues la superioridad futbolística de los catalanes fue tal que volvió impensable que los famosos red devils pudiesen siquiera acercarse a la victoria. Barcelona demostró que es el mejor equipo del mundo y que sus triunfos le hacen mucho bien no sólo al futbol sino a las filosofías de la vida que pregonan la creatividad, la sensibilidad, la nobleza, la ética y la estética. Ver jugar a esos locos bajitos (para citar a ese otro gran catalán que es Joan Manuel Serrat) es una delicia, tiene un efecto hipnótico que embelesa y conquista a cualquiera que guste del balompié como una de las bellas artes. Hoy lo demostraron en el mítico estadio de Wembley, al borrar casi por completo de la cancha al orgulloso y flamante campeón de la Liga Premier de Inglaterra, ese ManU que hace unas semanas nos diera la impresión de ser uno de los más grandes cuadros del mundo y que lo es, de hecho, pero que ante un equipo como el Barça, proveniente de otra dimensión, de otro planeta, nada tenía que hacer.


Pep Guardiola es un genio. Su calidad como técnico es tan grandiosa como su calidad humana. Sabe de estrategias y tácticas, pero sobre todo sabe de detalles sensibles como los que tuvo con Éric Abidal o con Carles Puyol. Se quedará con el Barcelona y eso es una buena noticia, no sólo para los seguidores del equipo sino para todo aquel que aún confíe en las posibilidades de la belleza.
Pero hablaba de los locos bajitos. De Xavi Hernández, Lio Messi y Andrés Iniesta. Una triada de pequeños artistas que semana tras semana bordan con finura una tela de riquísimo entramado. Son ellos tres el alma de un conjunto de hombres sonrientes y atrevidos, quienes al lado de otros (desde David Villa hasta Daniel Alves, desde Gerard Piquet hasta Sergio Busquets, desde Víctor Valdés hasta Pedrito Rodríguez y varios más) han dado al mundo una gran certeza: la de que son los seres humanos más sencillos quienes pueden provocarnos la alegría y devolvernos la esperanza en un futuro mejor. Porque en un balón de futbol también puede estar encerrado el secreto de la vida.

Reynoso y Brailovsky

Es un lugar común decir que la carrera del director técnico es volátil e incierta y que su permanencia al frente de un equipo depende siempre de los resultados. Sobre todo en un torneo, como el mexicano, que no permite la planificación a corto plazo.
En estos días, dos entrenadores han hecho sonar su nombre, uno por su sorpresiva y aparatosa reaparición y otro por su esperado y lógico despido. Carlos Reynoso y Daniel Brailovsky. En sus respectivos momentos, bujías y estrellas del club América. El primero, en los años setenta; el segundo, en los ochenta (nunca llegaron a jugar juntos).
Después de una larga y accidentada carrera como jugador y director técnico, el chileno Reynoso ha regresado a manejar los destinos futbolísticos del equipo de sus amores, en sustitución de un aburrido y apático Manuel Lapuente. No sabemos aún si logrará revolucionar a un cuadro que durante ya varias temporadas ha mostrado una cara lamentable y un futbol tan ineficaz como aburrido. Por lo pronto, debutó con el pie derecho, al derrotar en su casa al hasta este sábado líder invicto del actual Torneo de Clausura 2011: el Atlas.


Por su parte, el argentino Brailovsky (buen comentarista, pero… ¿quién le dijo que es entrenador?) no dio una con los ex electricistas y luego de acumular cuatro derrotas seguidas y sin lograr anotar un solo gol, fue echado sin más del conjunto de Aguascalientes. No sé si regresará a ESPN 2, pero ojalá ya se dé cuenta de su realidad y, por su bien, nunca vuelva a hacer el intento de dirigir a un equipo profesional.
Dos tipos que fueron grandes como jugadores y que nos regalaron momentos de antología en las canchas, pero que en su segunda faceta dieron más lástimas que satisfacciones. Carlos Reynoso está ante una nueva oportunidad de revertir la mala opinión que como director técnico y como persona ha generado en muchos. Daniel Brailovsky… Querido Ruso, tus compas de Futbol Picante te esperan.

Dos jornadas

Se han cumplido dos jornadas del torneo mexicano de futbol y las cosas son como suelen ser: los equipos chicos se colocan en los primeros lugares y los equipos grandes (es un decir) sufren y se sitúan en los últimos sitios. Así pasa casi siempre con cuadros como el Atlas que arrancan más que bien para irse cayendo poco a poco, cosa que muy posiblemente sucederá. De cualquier manera, no deja de sorprender que el Monterrey lleve dos derrotas seguidas o que el San Luis mantenga marca perfecta. Del América y las Chivas no extraña ya su mediocridad. Necaxa parece condenado de antemano al descenso, sobre todo por lo bien arnadito que se ve su rival más directo, el Querétaro. Atlante está mostrando rápidamente el estilo ofensivo y lucidor de los equipos del Piojo Herrera, pero no nos extrañe que con el transcurrir de las semanas empiece a decaer por sus fallas defensivas. Los Pumas, bien a secas. Se ven sólidos y tal vez se mantengan en ese tenor. Tendrán su primera prueba de fuego el sábado próximo ante el Cruz Azul, en el estadio de los cementeros, otro cuadro que ha mostrado las dos caras típicas de los equipos mexicanos: una victoria contundente y enseguida una derrota humillante. Así las cosas en este futbol nuestro de cada día, en el que las noticias más notables son siempre las que tienen que ver con lo que sucede más allá de las canchas. Si no, que le pregunten a la Comisión de Arbitraje o al presidente del América.